La prueba de la necesidad de una solución definitiva al problema planteado, fueron las lluvias producidas el pasado sábado 18 de junio y 18 de julio de 2011. Si bien gracias a los sumideros construidos por el Municipio de Lomas de Zamora las aguas pluviales drenaron más rápido que lo que normalmente lo hacían, en varios comercios y domicilios de la zona igualmente entró agua. Pero ahora tenemos una nueva problemática y es que en lugares que antes no se inundaban entró agua por los conductos cloacales, más claramente, desbordaron sanitarios y rejillas afectando a miles de familias.
Son millones de personas las que hace más de cincuenta años esperan poder solucionar este problema que ante cada tormenta nos provoca innumerables pérdidas materiales e inconmensurables daños personales.
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